La diferencia con otras recetas es que estas magdalenas son supertiernas y jugosas y se mantienen bien varios días y os aseguro que he provado unas cuantas.
Hay que reconocer que es todo un lujo desayunar o merendar con dulces caseros, así que animaros a hacer estas magdalenas .....
Ingredientes
130 ml de nata para cocinar
30 ml de aceite de oliva virgen extra ( se puede poner de girasol )
2 huevos
1 cucharadita de extracto de vainilla
75 gr de azúcar
160 gr de harina
1 cucharadita y media d levadura en polvo
Un puñado de arándanos deshidratados
Un puñado de orejones
Un puñado de ciruelas deshidratadas
Para la cobertura
2 cucharadas de mantequilla
1 de harina
2 de azúcar moreno
1 pizca de canela en polvo
Elaboración
Mezclar los ingredientes secos ( la harina tamizada, la levadura y el azucar) y reservar.
En otro bol mezclar los demás ingredientes, y ahora mezclar todo los ingredientes líquidos y secos. No hay que batir demasiado solo integrar bien, sobre todo hay que evitar que queden grumos.
Macerar en agua caliente las frutas deshidratadas, una media hora y pasado este tiempo partir en trocitos los albaricoques y las ciruelas, los arándanos los he dejado enteros.
Preparar los moldes, si no tenéis se pueden poner en flaneras o poner el papel de Magdalena doble para que no pierdan la forma al hornearlas. Llenarlos a la mitad con la masa y poner unos trocitos de fruta en cada una de ellas.
Yo no he mezclado las frutas, he hecho unas con arandanos, otras con albaricoques y otras con ciruelas y todas muy buenas.
Preparar la cobertura mezclando todos los ingredientes y poner media cucharadita en cada una de ellas.
Ahora solo queda precalentar el horno a 200 grados y cocer unos 20 minutos o hasta que halla subido y estén doraditas.
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